Desde Etnopedroches trabajamos para la puesta en valor de las tradiciones y las culturas del trabajo del Valle de Los Pedroches.

Siguiendo una metodología etnográfica basada en el trabajo de campo y trabajando desde la educación cultural, consideramos que el formato de teatralizaciones es un recurso educativo que permite promocionar y poner en valor el patrimonio cultural inmaterial de Los Pedroches.

Y en este entramado, nace el Monólogo teatralizado “De noche se peinó la mujer del pastor”, como una apuesta por visibilizar y dar a conocer la cultura del trabajo y el saber tradicional arraigado en la vida de las mujeres rurales del Valle de Los Pedroches. En clave femenina, para escuchar y conocer los pensamientos y los sentimientos de las trabajadoras jornaleras, madres, luchadoras, pastoras, aceituneras y cuidadoras del hogar.

Etnopedroches teje su segundo monólogo etnográfico, “Vestida de novia”. Con ilusión, con paciencia. Hilando entrevistas presentes con libros de tradiciones ancestrales.

Un proyecto que quiere visibilizar y poner en valor dos rituales que otorgan peculiaridad identitaria a los vecinos y vecinas y Añora: la festividad de las Cruces de mayo y la celebración de las bodas.

Es una propuesta creativa que quiere conectar simbólicamente dos expresiones colectivas vestidas de feminidad, otorgando a las mujeres el protagonismo que le corresponde como transmisoras y herederas de la identidad cultural noriega.

Vestida de Novia comienza su trabajo con un proceso de investigación, conociendo a través de testimonios directos o bien a través de fuentes documentales locales. Porque queremos conocer cómo se conectan simbólicamente las cruces de mayo con las bodas, qué elementos tienen en común, cuál es el protagonismo de las mujeres, cuáles son los preparativos asociados a ellas, la gastronomía, las coplas, la participación de la familia, la religiosidad oficial o la religiosidad popular asociadas a la naturaleza y la primavera, los discursos y palabras locales, los espacios de conflictos y/o acuerdos simbólicos, los cambios y permanencias, los medios de transmisión a las nuevas generaciones. Conociendo su historia pasada y su presente vivo. Profundizando en las claves de nuestra identidad, en nuestro sentir colectivo como mujeres de Los Pedroches. Afirmando quiénes fuimos ayer para reconocernos hoy, en nuestro presente heredado.

Es una escenificación teatralizada de la simbología femenina que prepara y viste las cruces de Añora como si de una novia se tratara. Un recorrido por el origen de la celebración de la cruz, analizando sus cambios y permanencias. Una puesta en valor del trabajo silencioso de las artesanas cruceras, representación de fragmentos de las coplas de mayo y recreación artística de un ritual colectivo que acoge la entrada de la primavera y engalana las calles de Añora de identidades compartidas, vividas, sentidas, hechas flores con imaginación y cariño. Vestidas, sentidas y creadas en femenino.

Con perspectiva de género, siguiendo la estela de los anteriores monólogos, presentamos la teatralización “Al calor de la lumbre”, donde el fuego, que permanece inmutable a través del tiempo, nos trae las vivencias de una joven piconera, aceitunera y costurera, una solterona con carácter y sensibilidad que nos cuenta su historia personal de autoestima y coraje, de trabajo digno en los olivares de Los Pedroches. Al calor de la lumbre y siguiendo este hilo narrativo, se recreará a través del cante, el baile y la expresión corporal las tradiciones orales y las leyendas que rodean al ritual festivo de la Candelaria, del invierno nos sienta alrededor de la candela, que nos trae a la memoria historias pasadas y presentes, canciones, cuentos y leyendas, inventadas o reales; para calentarnos, cobijarnos, cocinar nuestros alimentos y cuidarnos en las largas noches de frío. Como hacemos nosotras, como lo hemos hecho siempre, con paciencia, con memoria, zurciendo tradiciones bajo la luz de un candil.